LUCES ARTIFICIALES

Luces artificiales anuncian el fin de la incertidumbre. Llegan de todas partes. No hay dónde esconderse ni qué ponerse. Una mujer me presta su chaqueta de lentejuelas con un pájaro agujereado en la solapa como si fuera de paja. La médica examina mis pechos mientras sus compañeras nos observan y toman alcoholes. Ella que me quiere, anota algo en su libreta de guardia manchada de comida del día anterior. ¿Qué anota, por qué no me lo dice?

Cambio de posición.

Mis tíos dejan regalos al pie de la pared de ninguna habitación. Los míos son más baratos que los de sus hijos, que calzan letras grandes de cosa cara en la portada.

Soy una niña que ve y escucha mentes. Una niña normal, con los poderes oníricos de cualquier niña, con perdón y amor innatos en la piel, sin pensar demasiado y sintiendo mucho. ¡Instinto querido, guíame por tu camino de tejidos extraños del color de la paciencia! Llegados a este punto, reaparece una historia sin estructura de los que sólo saben hablar al otro lado del muro. Una historia que no se puede contar con palabras. Creo que “los del otro lado” intentaban darme un mensaje, ¿tal vez era una clave para recordar mis sueños? No sé, quizá no era nada definido y sólo intentaban decirme que fuera “más allá”, más adentro.

¿Dónde vamos cuando vamos “más allá”?

Hago la mochila y me voy. No quiero quedarme atrapada en el “más acá”. O en el “más aquí”, que es aun peor.

Quiero salir del “más aquí” para encontrar el libro donde todo lo pone y ya no hay nada más que preguntar nunca más, el libro que todo lo intuye, un libro cuyas palabras se adelantan a tus pensamientos para mostrarte que es inútil comerse la cabeza, que no existe el “a priori”.

El libro aniquilador de los “a prioris”. Aniquila la anticipación. Aplasta con cariño las suposiciones.

¡¿Cómo algo tan inútil puede ser tan poderoso?!

Suponer, pre-venir, anticipar, invertir, pre-ocuparse, ser prudente, predicciones, provisiones, prevenciones, protecciones…

Cambio de posición.

Camino hacia ningún lugar conocido que no puedo recordar. El olvido se instala en mi memoria y la pereza le nutre porque nada es importante al otro lado del muro, en el lado del muro donde la materia de lo que sucede es tan frágil que se rompe con tan sólo mirarla. Te asomas, y antes de clavarle un trocito de intención de mirada, el suceso desaparece. Es travieso, es juego continuo, es lenguaje de juego que en el fondo sólo quiere que le prestes atención. Pero estamos demasiado ocupados. Estamos demasiado ocupados fingiendo no saber que le estamos dando la espalda a una parte contundente y valiosa de nosotros mismos. Porque cuando nos despertamos la programación está hecha y todo es demasiado importante. Las preocupaciones no nos dejan dormir y las obligaciones no nos dejan atrapar nuestros sueños.

¡Atrapa tus Sueños!Pero sí recordamos el aliento del vecino, el zarpazo al alma, el baile roto, el barro en el zapato, el culo del moreno… Y cosas preciosas también suceden al Otro lado del Muro. Un muro que no existe, porque poner fronteras dentro de uno mismo es como cagar hacia arriba.

Muro de materia mente.
Muro-de-materia-mente.
Muro-de-materia-mente.
¡¡Muro-de-materia-mente!!

¿Qué hay al otro lado cuando no sabes en qué lado estás?

Verbos, sustantivos, predicados y sujetos desconocidos me piden que me posicione. ¡¡¿De qué lado estás?!! ¡¡¿De qué lado estás?!! ¡¡¿De qué lado estás?!! Estoy en La Mitad del Mundo, paseando fronteras. Cambio de posición, de opinión, cambio de color. Habito palabras sin contenido, motivos sin explicación, habito materia desconocida. Habito memoria de sueño.

Memoria de sueño, memoria de sueño, memoria de sueño.

Memoriadesueñomemoriadesueñomemoriadesueñomemoria. Sin acción, sin palabras, sinsonido, sin silencios. Lenguaje sin lengua ni ojos ni idioma, sin moneda ni danza ni evangelio. Lenguaje sin vacío, sin rostro, sin miedo, sin pasión. Lenguaje sin camino que recorrer ni tierra que pisar. Lenguaje sin compromiso ni leyes ¡ni promesas!

Pañuelos fáciles con espuelas de parafina. Muertos en bicicleta por el ombligo de tu madre.

Lentes metálicas porque sí. Ancianos en barcos de papel Albal. Besos de excrementos mentales.

Hipotecas campantes en árboles de cuero. Sexualmente Pipi Langstrump. Ballenas telefónicas impúdicas, populacho en salsa de soja, patacones con corpiño, escupitajos entre luces de animal.

Bailes de-ojos-rotos-con-tapón. Militares en caldo de tejado. Pájaros de plátano encendido. Tejidos de hojalata como herederos. Dramas in Vitro Un delantal suicida entre chinos lombardos Edificios babeantes en motocicleta Cumbias de hormigón sin cuello Frascos llorones al volante.

Pázuelos con de paralasfi ErtosMuencleta Omcibligosdetumá Lendretesmetalírque

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